Escuchaba atentamente el editorial de
Rodrigo Wong Arévalo del 31 de marzo de 2021, en el que dice hacer un análisis
objetivo de la sentencia de Tony Hernández y como eso debe preocuparnos a los hondureños.
Tiene la osadía este seudoperiodista de decir, y cito, que “el Juez Castel de manera insensata se lleva de encuentro a todo el país, algo que para todo buen hondureño es inaceptable”
Y arenga sobre la culpabilidad de Tony y la
actitud heroica de su hermano “cuando expresó que nadie está por encima de
la ley”
Continúa argumentando que la ley de os EE
UU no es perfecta y que tiene una historia plagada de injusticias… insinuando que
el pobre Tony es inocente puesto que un agente de la DEA Coordinador de
investigaciones sobre actividades de narco-tráfico en Centroamérica, México y
Colombia dijo no haber conocido a Tony. Dice que ese es un error porque eso empujó
a los fiscales a volcarse hacia los testimonios de los capos.
Sigue argumentando el “chinito”, que,
coincidiendo con el juicio, dice que alcanzo mucha circulación un libro de la
Periodista mejicana Anabel Hernández titulado “El Traidor, el diario secreto
del Hijo del Mayo”, en el que uno de sus capítulos habla del soborno que Don
H (Héctor Emilio Fernández Rosa) habría hecho a Manuel Zelaya Rosales, les
aconseja, como gran docto que es, el interesarse al contenido de ese libro.
Acusa además a la justicia de los EEUU de
querer desmantelar un gobierno y hacerle daño a un País. Y más sorprendente aún,
les dice a los ciudadanos norteamericanos que tienen que preocuparse porque el
sistema jurídico de su país “tiene una grave falencia” (quiso decir
falla puesto que falencia es un Error que se comete al afirmar o asegurar
cierta cosa o cuando un comerciante quiebra).
Califica la sentencia de Castel de
intromisión para derrocar al gobierno de Honduras. Y finaliza diciendo que la
máxima que nadie está por encima de la ley se le debe aplicar también al
Juez Castel, a los Jurados y a los Fiscales.
Analicemos punto por punto esta
elucubración de este don H (Hermes).
El Juez Castel se lleva de encuentro a todo el País
Objetivamente, el Juez Castel no se está llevando de encuentro a nadie más que los narcos y los sicarios hondureños, de los que desafortunadamente una gran parte de los funcionarios del Estado Forman parte. Que yo sepa, el nombre de Goyo peloecuca, el de Juan piturrilla y el de mondongo juco, los vaguitos del pueblo no salen allí mencionados en ese juicio, pero el de los tamagases que nos gobiernan sí. No es el país al que se está juzgando. Se está juzgando a un Estado fallido. Ese Estado en el que la impunidad, la plata, el gas lacrimógeno y el plomo priman por encima de la justicia y el derecho.
Lo que se debería preguntar el chinito es ¿quién
ha construido ese Estado fallido? Si no lo sabe yo le puedo dar algunos
elementos de respuesta. ¡Usted señor Arévalo! Usted con editoriales tan bajos y
faltos de objetividad periodística como ese. Usted y la bola de seguidores de
los medios hondureños al servicio de los testaferros de los que si están por
encima de la ley y la justicia catracha.
Estar por encima de la ley
Sorprendente, bueno no tanto, viniendo de su des-prestigiada lengua el calificar de heroica la actitud del presidente Hernández cuando capturaron a su hermano. Pues fíjese que heroica sería también la actitud de JOH, si el mismo se aplicara la máxima y saliese a responder a esas interminables menciones en las salas de justicia de los EEUU. Ya en Honduras ya sabemos quién es y sabemos que él está o se ha puesto por encima de la ley, porque impúdicamente él piensa que es la ley. Es JOH quien ha violado y reviolado la Constitución y las leyes, es JOH quien ha mandado a su policía pretoriana a reprimir al pueblo, es JOH quien paga por editoriales como ese.
La Justicia gringa no es perfecta
¡Ah! y se le olvidó que en juicio de Tony hubo 5 testigos independientes que no son capos, infórmese.
“El Traidor, el diario secreto del Hijo del Mayo”
La osadía de Wong Arévalo, trasciende lo
ridículo. Le recomienda a los jueces y fiscales de EEUU que se agachen y lean
el libro de Anabel Hernández, un librito interesante y con ciertos errores,
editado por la editorial Grijalbo en enero de 2020. Será tan bobo Wong, que se
le olvida que esa es una fuente secundaria escrita en gran parte sobre la base
de documentos públicos del departamento de Justicia de los EEUU y a los cuales
un tontito como yo tiene acceso, no digamos los abogados, jueces y jurados de
los EEUU. Si no, como la autora hubiese escrito ese librito. Que conste, que en
los párrafos siguientes nos estoy defendiendo ni acusando a nadie solo
exponiendo hechos, para aquellos que no les gusta la objetividad histórica.
En este libro en la página 174 dice lo
siguiente:
“Poco antes, en 2014, arrestaron al
narcotraficante hondureño Héctor Emilio Fernández Rosa, quien era proveedor de
cárteles mexicanos desde 1998 y llegó a construir el Cártel de los Soles en su
país. Fernández Rosa pagó 2 millones de dólares de soborno a Manuel Zelaya,
quien fuera electo presidente de Honduras en 2006 y cuyo breve mandato terminó
con un golpe de Estado en 2009. Luego financió la campaña política del diputado
que se convirtió en presidente en 2009, Roberto Micheletti, y con esto obtuvo
carta abierta para llevar a Honduras cargamentos masivos de cocaína”
Lo que no dice el chinito es que, la autora
omite muchas partes del documento que consultó para escribir ese párrafo. Ella
consultó documentos públicos del departamento de Justicia de los Estados
Unidos, en donde no se mencionan nombres (Ella los deduce por las fechas e
incurre en el error de decir que Micheletti fue electo en 2009, cuando en
realidad fue Pepe). En esos documentos lo que encontramos, y léase atentamente,
es lo siguiente, refiriéndose a las Actividades de “Don H” y el cartel de Los
Soles en Honduras:
“Finalmente, a diferencia de Colombia,
la ley hondureña no permitió la extradición de ciudadanos hondureños para
propósitos de enjuiciamientos por narcotráfico en Estados Unidos hasta 2012. La
primera extradición de este tipo no ocurrió hasta mayo de 2014, cuando Honduras
extraditó a Carlos Arnoldo Lobo, a / k / a “Negro”, para enfrentar cargos por
importación de cocaína en el Distrito Sur de Florida. Honduras extraditó al
acusado cinco meses después.
Sin embargo, antes de su aprehensión, el
acusado y otros traficantes hondureños prosperaron.
Hicieron millones de dólares e
infiltraron instituciones hondureñas en todos los niveles del gobierno al
invertir las ganancias de la droga en campañas políticas relacionadas con la
presidencia hondureña, escaños en el Congreso y cargos locales como alcaldes. El
acusado hizo esto en 2005, como se analiza a continuación, cuando él y un
co-conspirador pagaron más de $ 2 millones en ganancias de la droga a un
funcionario que finalmente se desempeñó como presidente de Honduras a partir de
aproximadamente 2006 (“Oficial-1”). (Informe de Investigación de Presencia del
2 de julio de 2019 (“PSR”) 33). Aproximadamente en 2009, en la época de un
golpe de Estado que obligó al Oficial-1 a dejar el cargo, los líderes de una organización
de narcotráfico hondureña conocida como Los Cachiros, que luego se alineó con
el acusado para participar tanto en envíos de drogas como en asesinatos, pagó
aproximadamente $ 500,000 en ganancias de la droga para apoyar la campaña del
entonces congresista que asumió la presidencia en 2009. Además de usar las
ganancias de la droga para sobornar presidentes y otros funcionarios de alto
rango, los traficantes hondureños como el acusado obtuvieron mayor protección
contra la interferencia oficial y facilitaron el paso seguro a través de
Honduras de sus cargamentos masivos de cocaína, sobornando a otros funcionarios
públicos, policías y personal militar para acceder a información sobre
investigaciones en curso, puestos de control militares y de vigilancia, e
interdicciones de narcóticos planificadas. (Ver, por ejemplo, PSR 32). Así,
“las instituciones de gobierno estaban sujetas a la corrupción y la influencia
política, y algunos funcionarios realizaban prácticas corruptas con impunidad”.
En noviembre de 2018, el hermano del actual presidente de Honduras fue detenido
en Miami por narcotráfico y cargos de armas con acusaciones que datan de 2004,
y está programado que proceda a juicio en octubre de 2019 ante el juez Castel.”
Fuente: Departamento de Justicia USA:Case 1:12-cr-00894-RJS Document 79 Filed 07/26/19, paginas 3-5.
Mas tarde el mismo documento al referirse
al oficial-1 anota:
“El ascenso del acusado en las filas le
permitió retirarse como transportista y asumir un rol de coordinación que
presentaba menos riesgo legal en caso de que uno de los envíos fuera incautado.
Entre
Aproximadamente en 2004 y 2008, el
acusado supervisó el transporte de la cocaína desde Colón a Copán utilizando
remolques tractores más grandes con caletas más grandes. (Ver idem 13). En
lugar de conducir los camiones, a menudo viajaba en un vehículo de escolta para
poder intervenir si surgía un problema, como la necesidad de pagar a otro
funcionario. (Ver idem.).
Señor Arévalo, sea serio y antes de querer
darle cátedra a los jueces Gringos infórmese. Usted cree que los hondureños de
ahora somos los penquitos de los tiempos en que usted trabajaba en Radio
América. ¿se acuerda, cuando le pusieron una bomba? Creo que ya se le olvido,
ya está viejito.
Mire, por allí dicen que ladrón que roba a
ladrón tiene cien años de perdón.
La justicia de los EEUU quiere desmantelar un gobierno
Le voy a contar una historia, usted se
acuerda de la invasión a Grenada y del asesinato de Maurice Bishop, Usted se
acuerda del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 en Chile, Usted se acuerda
de la invasión a Panamá en 1989, Usted se acuerda de la guerra del Golfo la Primavera
Árabe. Y para apachurrarle el ojo, usted se acuerda del Golpe de estado de
2009. Así actúa el imperio cuando se trata de desmantelar gobiernos. No
juzgando criminales.
Cómo tiene el valor usted de denunciar la
justicia Gringa cuando no es capaz de denunciar la injusticia de su propio país
y que además usted es uno de los artífices del desmantelamiento del Estado de
derecho en Honduras.
Cómo puede usted señor dar lecciones de
moral cuando desde hace más de diez años usted es uno de los promotores del
derrumbe de lo poco de dignidad que nos quedaba en Honduras.
Usted califica la sentencia del Juez Castel
de intromisión para derrocar al gobierno de Honduras.
Ese no es el caso y si así lo fuera, pues
bienvenida sea su intromisión. Usted es choco o se hace el choco. No miró el
fiestón que se armó solo con la sentencia de Tony. Imagínese cuando caiga el
tatascán o la mera taramella como decimos los catrachos con C o con G. Vea y no
lo le recuerden el episodio aquel que mencioné más arriba.